Las raíces de las plantas

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Las raíces de las plantas

Las raíces de las plantas constituyen el primer órgano de la planta que, después de la germinación, entra en contacto directo con el entorno de cultivo que la rodea. Por lo general, crecen hacia el interior del suelo y no suelen ser visibles porque están enterradas, salvo en el caso de las raíces adventicias, que nacen del tallo, una parte aérea de la planta, y posteriormente se dirigen hacia el sustrato, donde encuentran el ambiente adecuado para desarrollarse.

Para potenciar este crecimiento y asegurar un sistema radicular fuerte y saludable, se puede utilizar un enraizante como Freeroot. Este producto estimula la formación de raíces primarias, secundarias y capilares, promoviendo una mayor capacidad de absorción de nutrientes y agua.

El uso de Freeroot es especialmente beneficioso en las primeras etapas de vida de la planta o durante el enraizamiento de esquejes, asegurando un desarrollo rápido y vigoroso incluso en condiciones de cultivo exigentes. Con su aplicación, se logra un sistema radicular robusto que favorece el crecimiento de la planta y su rendimiento final.

En las plantas de cannabis, las raíces pueden presentarse en ambas formas, aunque las adventicias son menos comunes y se observan principalmente en condiciones de cultivo con una humedad alta y constante. Es muy habitual encontrarlas durante el proceso de enraizamiento de los esquejes de marihuana.

El desarrollo de las raíces

El crecimiento de las raíces ocurre principalmente en las primeras etapas de vida de la planta, donde se forman numerosas raíces secundarias y capilares para absorber nutrientes.

Es esencial manejar bien el riego, ya que las raíces buscan humedad en el sustrato. Si el suelo está demasiado húmedo, las raíces no se expanden, lo que limita el desarrollo de la planta. Esto es especialmente crítico en autoflorecientes, cuyo crecimiento es breve y cualquier error afecta su tamaño y producción.

Por ello, respetar los ciclos de humedad y sequedad garantiza un sistema radicular fuerte que sustenta una planta sana y productiva.

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